El hospital de Santa Emilia “Hospitalillo” de Tarancón y su refugio antiaéreo han sido incluidos de oficio en el Inventario de Patrimonio Histórico-Artístico de Castilla La Mancha, como elementos de Interés Patrimonial; un gran paso dado que garantiza su protección, no pudiendo ser derribados sin autorización de patrimonio.
En numerosas ocasiones hemos expresado que a pesar de la falta de fondos para su rehabilitación y conservación y de la complicada situación de la propiedad y su gestión por una fundación, era necesaria la protección del edificio, algo que requiere una inversión mínima y no precisa la aprobación del patronato. Se nos había propuesto intentar que fuera declarado BIC, a lo que dimos nuestro apoyo, pero que no tomamos como iniciativa propia dado lo prolongado y complicado de su tramitación.
El diciembre pasado, preparando la nueva campaña en defensa del hospital y de la memoria de las Brigadas Internacionales, nuestro compañero Sergio convocó una reunión el 6 de diciembre pasado con el arqueólogo Pedro Pablo de las Muelas Chico que tenía algo interesante que aportar. Nos informó de la posibilidad de incluir el hospital y el refugio antiaéreo en el inventario de patrimonio de manera sencilla, solicitando información a la jefatura de servicio provincial de patrimonio sobre si estaban incluidos o no en el inventario y su situación; así, hicimos la consulta el 7 de diciembre y se abrió expediente sobre el hospital y refugio, lo que ha supuesto su protección de oficio al incluirlos en el inventario.
Encargamos a Pedro de las Muelas Chico un informe técnico para adjuntar al expediente del edificio en Patrimonio, en el que llevamos trabajando mes y medio y que estará listo para finales de febrero. De hecho, pensábamos que la inclusión en el inventario no se llevaría a efecto hasta la presentación del citado informe, grata sorpresa que haya ido todo más rápido de lo esperado.
Desde que conocimos la noticia del intento de destrucción de documentos del archivo de Tarancón, (http://www.entarancon.es/
Una vez más la sociedad civil, pese a quien pese, da un paso en la salvaguarda de un edificio importante para el pueblo y en defensa de la memoria de una parte de su historia, su papel en la Guerra Civil y su vinculación, la vinculación del pueblo, con las Brigadas Internacionales, que creemos ha sido decisivo en su inclusión en el inventario de Patrimonio. Esa memoria que muchos niegan, que dicen provoca enfrentamientos y reabre heridas, mientras que defienden la persistencia de los símbolos de la dictadura y del dictador mismo, porque son historia. Entonces, ¿esto no es historia? Sí que lo es, tanto como para ser incluido en el inventario de patrimonio por su interés histórico. Esperamos que la ciudadanía e instituciones compartan nuestra alegría por este paso adelante en la conservación de nuestra memoria que es también nuestro patrimonio.
